martes, 3 de julio de 2018

Psiqué te digo... de tu camino por la vida


Podría ser que en realidad no te interese llegar a un lugar en específico, simplemente eres feliz siguiendo a alguien y mientras esa persona te permita estar cerca como su sombra, podrás llegar siempre exactamente al lugar que esa persona quiera. Si esa persona tiene un para qué, ten por seguro que siempre encontrará la manera de llegar a donde quiera. Y si tu relación con esa persona dura, también tendrás a dónde llegar, pero no tendrás tu propio "para qué". Y si esa relación se rompe, con aquella persona se irán tus destinos, tus metas y los "para qués" que creías tuyos.

Tal vez ocurra que te han decepcionado por el camino, o te han hecho enojar y ya no quieres avanzar, así que rechazas tu ruta interior y andas buscando respuestas allá afuera, con el pretexto tonto de que afuera está más iluminado que dentro de ti. Tal vez sea cierto, pero aún si fuera de ti hay mucha luz, sabes que allá no encontrarás tu rumbo sino el de otros. A veces es necesario entrar a la oscuridad y las penumbras de tu interior para darte claridad. Solo entonces reencontrarás tu camino.

Te puedes encontrar con la idea de querer llegar a un lugar que ya ocupa otra persona, en cuyo caso estarás al pendiente de que lo deje, lo quiten de ahí, se muera o por cualquier razón se mueva y ocupe otro lugar. Pueden pasar años y no hay ninguna garantía de que tú ocuparás ese lugar una vez que esté desocupado, pero sí habrás dejado de conocer tu propia ruta por dedicar tu tiempo (semanas, meses o años) a esperar.

Puede ser que dé un poco de miedo o inquietud avanzar, aunque tengas deseos de hacerlo y si le haces caso al miedo nunca sabrás cómo construir tu camino y mucho menos hasta dónde te podría llevar. Cada persona que ves con éxito desde tu lugar ha tenido que crear su camino, algunos afortunados con mucho apoyo y ayuda, otros han tenido compañía pero no ayuda y también hay quienes hacen su camino solos.

A veces parece que las personas ya llegaron a su meta, pero el camino no termina de construirse y de recorrerse mientras estamos vivos. Si aún no encuentras el tuyo es hora de moverse y aprovechar tu vida recorriendo tu ruta y no sentándote a un lado a esperar que pase alguien para pedirle informes acerca de ese camino que es solo tuyo.

Hasta luego.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

¿Quieres comentar?: