"Los hombres han inventado la vida en sociedad porque les es más fácil soportar a los demás que soportarse a sí mismos."
(Schopenhauer)
Hace unos días escribí acerca de la importancia de tener, además de amor, valor en nuestras relaciones. Y después se me vinieron a la memoria algunas parejas que no han renunciado a su relación durante años y años de estarse peleando, humillando, insultando, exhibiéndose mutuamente o, simplemente, ignorándose. Entonces pensé que es necesario hacer una aclaración obvia pero también útil (eso espero):
Una relación que dura mucho no es necesariamente una sana relación. Las personas que prefieren vivir sintiéndose mal en lugar de enfrentarse a la vida sin esa mala compañía, están viviendo una relación enfermiza. Aunque ya lo había mencionado en alguna ocasión, vale la pena repetir esto: Aguantar a una persona no es amarla. Si amas a alguien no tienes que aguantar su presencia, sino disfrutarla y aprovecharla para que ambos aprendan y crezcan en una sana compañía.
"No se necesita mucho valor para aguantar. Se necesita mucho valor para soltarse y dejar ir."
(Anónimo)
Así que no nos engañemos: No digas que estás con una persona por valor ni porque eres valiente, cuando es todo lo contrario: Si vives inconforme por tener que aguantar a la gente con la vives, hay que reconocer que estás ahí porque no te animas a enfrentar su enojo, su decepción, sus rencores, sus reclamos o sus malos tratos. Estás ahí porque te da miedo enfrentar la vida a solas (en realidad cada uno enfrenta su propia vida siempre, pero es bonito tener la ilusión de que otra persona la enfrenta junto a uno, aunque sea limitándonos o menospreciándonos).
En algunos casos es posible que en realidad haya amor en esa relación donde las personas se lastiman y se dañan la autoestima mutuamente. Pero sigue venciendo el miedo y solamente podrá haber amor y valor cuando se atrevan a enfrentar sus problemas. Si no pueden hacerlo solos hay que pedir ayuda profesional y para eso estamos los terapeutas familiares y de pareja, o el profesionista que te inspire más confianza.
Lo importante es dejar de vivir aguantando y pensando que "un día van a ver...", porque mientras no llegue ese día, seguiremos viviendo con limitaciones, con miedo y con frustración, porque no es posible tener una vida emocional limitada sin que esto afecte al resto de nuestra existencia.
Por último, una breve reflexión: Si dos personas viven quejándose mutuamente sin terminar su relación, entre ellas existe una especie de sociedad en la que una está dispuesta a abusar y hacer el papel de "mala" y la otra está dispuesta a aceptar el abuso todo el tiempo que sea necesario.
Hasta luego.
Como siempre Heri tan asertivo en tus reflexiones. Gracias hermano. Eh'Yeh
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