viernes, 8 de noviembre de 2013

El ejemplo

"El ejemplo es una lección que todos los hombres pueden leer"
Morris West




Hoy comparto una historia que a su vez me compartió mi amigocha Manguis, y que me gustó mucho porque ilustra de manera sencilla lo importante de ser coherentes en lo que decimos y lo que hacemos:

Una mujer fue con su hijo a ver a Gandhi. Gandhi le preguntó que quería y la mujer le pidió que consiguiese que su hijo dejase de comer azúcar, que comía tanto que estaba empezando a hacerle daño. Gandhi le contestó: 

"Traiga usted otra vez a su hijo dentro de dos semanas". 

Dos semanas más tarde la mujer volvió con su hijo. Gandhi se volvió hacia el niño y le dijo: 

“Deja de comer azúcar”. 

La mujer muy sorprendida le preguntó: 

"¿Por qué he tenido que esperar dos semanas para qué usted le dijese eso? ¿No podía habérselo dicho hace quince días?" 

Gandhi contestó: 

"No, porque hace dos semanas yo también comía azúcar".

Y claro, también hay que ver lo que pasa si no alcanzamos a comprender la importancia de esta coherencia:


Hasta luego.

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